Allá donde llegan los ojos cansados,

y la razón no entiende de razones

donde no hallo vado

y confundo horizontes.

Suelo a menudo pintar una sonrisa

con tus cabellos por pincel

que domo con caricias

sin olvidar que es libre ese corcel.

Pero el reloj

cortó las alas

a la imaginación

y  ahora se me va por las ramas

solo para ver el sol

por encima de los nubarrones

que me ocultan tus pupilas

y me hincha los cojones

saber que muy cabron el destino

trazó nuestras vidas

en distintos caminos

y que las frases

que siempre te digo

se las lleva como al dinero

se lo lleva el vino.

Siempre en estas calles

de la mano de la soledad

mientras la luna de reojo

me guiña un ojo al pasar.

Soy

Soy sirenas de policía

en un callejón a medianoche

acorralado entre tu sonrisa

y tu escote.

Soy el humo de un canuto

que se deja por la mitad

mientras lo llena todo el humo

y tu comienzas a olvidar.

Soy el segundo beso

que se da por olvidar el primero

para disimular el deseo

de que el amor sea eterno.

Soy una tarde de domingo

marcada por la lluvia

la soledad, lo que escribo

y las ganas de otro nuevo día.

Soy un cajón polvoriento

en el que hubo recuerdos

que se los ha llevado el viento

y no quedan ya ni restos.

Soy el viento

que roza tu piel

que transporta tu aliento

y que le sabe a miel.

Soy esa nube

que no tiene forma

que baja y sube

que no sigue normas.

Soy la mirada perdida

de un niño en su clase

que mira la vida

y no sabe concentrarse.

Soy contigo

lo que quieras que sea

lo mismo bajo hasta tu ombligo

que subo hasta tu melena

Iluso

Bardo poeta bardo,

que le susurra a la luna

versos siempre en vano

Basto poeta basto,

mece palabras en una cuna

acariciándolas con una mano.

Pues la otra la lleva herida

de coser cicatrices

de arrancarse las espinas

en el abismo de su vida

Malo poeta malo,

que le comen las lombrices

su corazón abandonado

Harto poeta harto,

de lo que siempre dices

y de que nadie te haga caso

Tonto iluso tonto

que en cada estrofa muere un poco

que dice ser poeta

de mierda, de manos vacías*

de noches prohibidas

y alcobas muy frías.

*Verso que aparece en la canción Marea del grupo Marea

Aveces sueño que soñamos,
en los pechos dorados
de una luna que nunca ha llorado
soñando juntos abrazados,
yo descalzo tu desnuda.
duermes yo respiro en los portales de tu pelo
y vivo de la miel que esconde tu figura
con la insistencia de este anhelo
de volver a probar esa droga dura.
que se oculta en tu boca,
en tu mirada, en tu ombligo
en tu cabecita loca,
en el mar de tu vicio.
Aveces sueño que me dicen loco,
que me ama la locura
porque escribo de todo
menos lo cercano a la cordura.
Pero ya me he marchado
con la sonrisa despeinada
los ojitos rojos de haber llorado
al cruzarte con la mirada.
casi que mejor cambiar el camino
no quedarse mirando el horizonte
dejar de cantarle a el destino
correr a oscuras subiendo el monte
hasta darme de bruces con la pared
y follarme todo lo que nunca mereció la pena

Sola por la vida bailaba

entre montañas de dudas,
niebla de desamores
tapa su sonrisa desnuda.
La cubría la marea,
y el cielo sobre un plano dibuja lágrimas
pa que mojen su melena
apagando la chispa que le queda.
Y aveces oye cantar a la sirenas
pero tapa sus oidos
pa no recordar lo vivido
cuando algo valia alguna vez la pena.
Un sol de caramelo
tatuaba poesía en las esquinas de tu pelo,
allí dónde me fundí junto a mis deseos
mientras escribía por tu cuerpo
con mis manos dulces versos.
Te recordaban las olas
acariciando la arena
a aquel cuerpo a solas
atravesando la vereda
que pronuciaba tu nombre
delante de un te quiero.
dónde hace mucho tiempo
solo es un mero recuerdo
pero un recuerdo...

Vamos a engañarnos...

Vamos a engañarnos...
prometiendo que la eternidad será el suspiro
que sale de tu boca antes de rozar mis labios
nunca abrir los ojos no sea como lo imagino
y se asemeje a lo que en libros escriben sabios,
que llaman ciencia a todo lo mágico.

Abrázame,
que el miedo de los dos sea uno solo
mientras me pongo a aullar como un lobo
y me revuelco por el lodo
pa olvidarme de lo que fuimos y de todo...
todo lo que estropee este sueño de este loco.

Pero vamos a engañarnos...
que el mundo solo cuide a los corazones enamorados
que en mis ojos si te miran vean angeles alados
y deseos bailando entre un cielo dorado,
cualquiera lo diría que con rozar tu piel me pongo colorado
y si me pongo haría un nudo de mi rabo.

Pero porfavor vamos a engañarnos, prometemelo,
que un momento pueda durar para siempre.
vamos a engañarnos joder.

Palabras con dulzura
entre retales de lujuria
pariendo imagenes puras
en los cristales de sus pupilas
reflejando criaturas
alejadas de la cordura
que la sociedad basura
impide retratar.

En las mente de los locos
tocando notas pa que las escuchen los sordos
luchando contra todo
lo que se llame realidad.
Y la sin razón que me guía
es la misma que escribe en tu piel mi poesía.
Que sabe a sopa fría,
a besos de despedida
y a los tirabuzones que adornan mi vida.

Quería volar con sus ojitos marrones
vivir entre musas y algodones
pero ni si quiera sabia hacer la cama
con mantas que saltaban por la ventana
pa escapar del mundo lleno de mierda
donde la vida se reduce a lo que hay entre tus piernas

Pillandome los dedos cada vez que cierro la puerta
que da a tu habitación
donde una araña medio muerta
teje telerañas en algo parecido a un corazón
mitad droga mitad alcohol
y otro tanto sueños metidos en un cajón

Menos mal que quedan las olas con sabor a sal
escuecen mis heridas pa ayudarme a recordar
que pensar en ti me sienta mal
si el infierno clama por un beso de tus labios
yo me vendo antes que agravar mis agravios
de la mierda nunca supe sacar un trozo de pan
pa calmar el hambre y las ganas de follar.

Dulce niña que me mata a escondidas
sabe que con una mentira
agarra mi alma vomitiba
y descose cicatrices mientras grita,
que un día tubo menos penas que alegrïa,
recordando que el sol la mata cada día
cuando sale y deja a la luna que se quede dormida.

Si falta algun recuerdo de alguna canción
que te haga recordar quien soy
con unas alas quizás podamos volar
sobre las miles de noches perdidas
que soñamos con atravesar con una ilusión
y lágrimas en las mejillas.

Desidia

Puedes verme por la calle caminando sin rumbo alguno,
sin más sentido que la soledad
que acaricia mis ojos y los bañan de lágrimas
Mientras busco colores pa pintar la realidad
y teñir de azul mis páginas
pa recordar el mar, el cielo y la libertad
pa pintar tus ojos en mi mente
que me iluminen cuando el sol se ausente

Pero por mucho que pese
el saber que me despierto
y nunca estas aqui
que no me da pa sonreír
se antoja el futuro incierto
el sol nunca me mira
la luna se rie de mí.

Azota mi ventana la lluvia de abril
en una maceta crece tó lo que me sobra pa reír
que son tus besos colocados con verdín
y me encierran en el redil
pa no mojarme con tu risa y volver a sentir
que una vez te quise cerca de mí

Y aunque el tiempo pase
y nunca se pare
yo me asomo a mi balcón
pa ver tu cuerpecito
pa saber de color es tu vestido
y seguir soñando dormido
mientras un sol malherido
cuida a la luna que no sabe que ha bebido
y un beso le ha pedido
sin saber ella para que.

La Noche

Se escapa el día entre las persianas,
un reloj con su aguja cose todas mis heridas
y el aire huele a María
y de lejos se oye policía.

No habrá musa que inspire a los poetas
a escribir versos en el torso de la luna
con los restos de tu amor
fabricar una enredadera
y así verla desnuda
mientras el sol muere entre sus tetas.
Y lleno con sangre hojas de libreta

Entre tu pelo sueño con pintar
un cielo pa poderte amar
con el humo de la noche volar
sin movernos ir a otro lugar

Una estrella llorando
dice que ha perdido
el sentido y el olvido
se llevo su destello
El silencio mató
las palabras de amor
que sangraba su corazón
y en sueños el alba llegó
Mezclando con el tiempo
agua fría y sentimiento
recuerdos...y llanto de la luna
que de desamor
le gana la locura
a la cordura
de saber que el tiempo no dura
más de lo que debiera durar.
No se olvida el sol de salir
el rocío empapa el jazmín
y la luna se empieza a vestir...

Versos que hacen prosa. Prosa que hace soledad

Tu boca marcaba el punto de partida.
mientras un sol borracho se escondía.
Y la luna se veía en aquel lugar
dónde me recordaste el placer de besar
esos labios que nunca me supieron amar
pero nunca sabremos si se volveran a rozar

Empaño los cristales que dan a tu patio
con el vao de mis pulmones
mientras un borrico sueña
que pinta corazones
en las esquinas de tus callejones

Dondé me acorralaron a tiros
y me follo el puto malfario
dondé nos hicimos ricos
prometiendo días de calendario
De sobra sabes que puedo prestarte mis alas
las veces que haga falta
cualquier día de la semana
mientras miras musarañas
en cuadro de tu casa
dónde hace ya tiempo
pinté una montaña
y subimos a su cima
pero corrimos como locos
buscando una salida
 
Mientras seguiré dónde estoy
esperando algún tren en la estación
jugando con el tic tac del reloj
mientras suena sabina en altavoz
sin embargo te quiero es la canción.

Te quiero

No sé escribir nada pa decir que te quiero una vez más,
otra vez que el olvido se acuerda de resucitar
que me tratan mal tus labios cuando juegan a besar.

Pasos.

Polvo, sudor y ansias. Era todo lo que albergaba su ser. Polvo del camino que se pegaba a sus piernas, sudor fruto del incombustible sol que le atizaba a todas horas y ansias de llegar a una meta demasiado lejana e incierta. No sabía que fuerzas eran aquellas que le hacían dar cada paso. Pero solo paso a paso conseguía llegar a su meta. Kilometros y kilometros caían como un muerto sobre su espalda, pero no se detenía, aunque más de una vez llego a pensarlo. Cuanto más caminaba por el sendero más lejana parecía su meta. Arrastrándose como un caracol con la casa acuestas, durmiendo poco y mal consiguió un buen día llegar a su objetivo. Y la felicidad que le invadió en ese momento era incoparable a la lucha y el dolor que había sufrido en sus carnes para llegar a ese lugar. Paso a paso consiguió llegar al fin del camino pero entonces comprendió que esa no era su meta, si no el princípio de un camino mucho mayor...

A la Soledad

Yo estoy aquí, como tu
Cada día en un lugar,
Labios fáciles para besar
Algo de temor a la Soledad 

Sabiendo que sin saber q hacer
Voy sabiendo cual es mi papel
De vez en cuando tengo que arder
Con algún velero que se deje querer

Voy rompiendo a pedradas,
Cada una de las ventanas
Pa que escapen llamaradas
De mis noches mas marranas

No se trata de ocultar,
Que soy un niño que no sabe contar,
Mejor se me da multiplicar
Por noches la Soledad

Soledad no es estar solo
Estar sin ti es Soledad 
Sin ti me vuelvo loco
Tu me sabes a libertad

Algún remedio hay
Pa evadir la Soledad
Pa evocar la libertada
Pero algún hijo puta lo trata de ilegal

Jardín del olvido.

Me dice que no quiere
le digo que te quiero,
no se quien viene
creo que el invierno.

Sé que vendrán vientos
pa follarme con la suerte
mientras busco tientos
pa echar a la muerte.

Creo que olia una fragancia,
antes de conocer tus besos
olor de tierna infancia,
ahora soy solo un preso

Preso en mis noches,
en el jardín de tu olvido,
dónde solo un fantoche,
riega un marchito olivo.

Cualquier Ciudad.

El mendigo de la calle muerto por sobredosis,
los chicos del barrio colocados en la barra de un bar,
un par de chulos en estado de psicosis,
una pareja aprendiendo a follar.

María cambiando sida por dinero,
la promesa del fútbol metida en la cocaína,
el ministro es un puto pajero,
el rey soñando con meterla en una esquina.

El clero desvirgando feligresas,
los niños dilatando las pupilas,
las niñas se visten de tigresas,
las madres pendientes de sus vidas.

La policía con su amable hostilidad,
los caciques negociando con narcos,
un yonki sin ninguna maldad,
el alcalde hasta el culo de fardos.

Esto puede ser cualquier ciudad.

Noche de Rock

Sonaba Rosendo en los portales de la luna.
Tu estabas sobre mi colchón de hierba desnuda.
Y el rocío mojaba tímidamente nuestros cuerpos,
borrachos, sin ropas y desprevenidos.
Tus sueños y los míos se lian en un papel,
y volvernos a reír una y otra vez.
Que bonito es vivir haciendo lo que quiero,
que bonito es quemar costo culero.
Voy a comerte el corazón,
perder el sentido y la razón.
Volar entre tus ramas y en alguna nota despertar al sol.
Si me esperas hasta el alba enseñarte lo que es el amor.
Mostrarle al firmamento la más bella estrella,
estrella que en mi mente la sin razón estrella
pequeñas dosis de locura y alguna que otra pella.